*A ti joven, queremos contarte que los Talleres de Oración y Vida para Jóvenes son el resultado de un arduo esfuerzo llevado a cabo a lo largo y ancho de la familia TOV para entregarte una sólida viga maestra que atraviesa el Taller de parte a parte: el anuncio vibrante de la personalidad de Jesucristo a fin de que puedan quedar fascinados por Él y se decidan a pisar sus pisadas.
También les presentamos un programa de liberación interior, un verdadero proceso de humanización y sobre todo un proyecto cristificante promovido por la oración.
Le llamamos TALLER DE ORACIÓN porque igual que en un taller se aprende a orar con una pedagogía práctica y experimental.
Progresivamente se aprende el trato personal, íntimo y profundo con el Señor de una manera variada y evolutiva.
Pero también es TALLER DE VIDA porque se enseña a vivir en dos dimensiones: en la perspectiva humana, librándose de tristezas y angustias, sanando las heridas de la vida; superando complejos de culpa, inferioridad, inseguridades, manías persecutorias, en fin recuperando la estabilidad emocional y la alegría de vivir.
En la perspectiva cristiana: bajo la pregunta ¿Qué haría Jesus en mi lugar? muriendo a los rasgos negativos de la personalidad y asumiendo los rasgos divinos de Jesus: paciencia, fortaleza, humildad, mansedumbre, amor, despreocupación por sí mismo, preocupación por los demás,...y por este camino el joven se humaniza, se engrandece y se transforma en apóstol y testigo de Jesus.
Características
Compartimos sus características:
El Taller se distingue por una rigurosa puntualidad, un orden estricto y mucha disciplina. No se ha de transformar la sesión en una reunión divertida y jocosa de un típico grupo juvenil. Más bien son sesiones de estudio y trabajo.
El Taller consta de diez sesiones; cada sesión dura una hora y tres cuartos. Y la sesión es semanal. El numero ideal de asistentes es entre diez y veinte jóvenes, aunque este numero puede ser mayor o menor.
El Taller compromete al joven en tres dimensiones: con Dios, consigo mismos, con los demás.
En cada sesión hay dos líneas fundamentales: una descendente, Dios habla al hombre; y otra, ascendente, el hombre habla (responde a Dios).
¿A qué jóvenes se les ofrece el servicio de Taller? La experiencia enseña que el taller, por su estructura y contenido, no es instrumento adecuado para los adolescentes. Sin embargo, también está demostrado que –siempre hablando en general- nuestro servicio produce resultados positivos con jóvenes de 17-18 años en adelante. Obviamente caben muchas excepciones.
Los Talleres son dirigidos por un Guía cuya misión consiste en poner en práctica el espíritu y los contenidos del Manual.
Al frente de los Guías hay una Coordinación Local, cuya función es autorizar, organizar y velar por la marcha de los Talleres.